Cualquier material en el mundo, por ejemplo las bolsas de plástico; tiene un tiempo determinado de degradación. La biodegradabilidad es el proceso por el cual ciertos materiales dependiendo de su composición física y química, se descomponen lentamente reintegrándose a la tierra, de una manera ecológica y natural, por acción de la naturaleza.
Por esta razón y para ayudar al planeta Tierra, un grupo de ingenieros chilenos de la de la empresa SoluBag ––con apoyo de tecnología china––, presentaron un concepto de bolsas de plástico que se disuelven en agua; fabricadas sin ningún derivado del petróleo y con materiales hidrosolubles, que no dañan el medioambiente, de acuerdo con la agencia de información AFP.
La idea que pasó del detergente a las bolsas de plástico
El gerente general de la empresa chilena, Roberto Astete, y el gerente comercial, Cristian Olivares comentaron que su idea comenzó hace cuatro años, cuando intentaban crear un detergente. Pero gracias a la modificación de la fórmula química del PVA (alcohol polivinílico), la cual se utiliza en la actualidad para producir bolsas de plástico, lograron el resultado de bolsas solubles en agua.
De qué están hechas y cómo funcionan
Esta bolsa biodegradable cumple con las mismas características de una plástica y son muy parecidas a simple vista. Sin embargo se fabrican con un componente que se extrae del gas natural (alcohol polivinílico), carbono, hidrógeno y polímero sintético, que al ser sumergido en agua se desintegra.
Los elementos de sus composición no contamina el ecosistema, ni al líquido que las absorbe. Asimismo, los emprendedores señalaron que se puede programar la temperatura del agua a la que se disuelva la bolsa, por lo que precipitaciones externas como la lluvia no impedirán su uso.
“Esta iniciativa permitirá sacar de circulación más de 3 millones de bolsas plásticas”, dijo Astete.
Estudios han comprobado que millones de aves mueren por la ingesta de plástico anualmente y que algunos animales, como las tortugas, no distinguen entre una bolsa plástica y una medusa, por lo que este material tóxico ha pasado a ser parte de su cadena alimenticia.
La firma chilena, la cual cuenta con doble patente, ya mantiene conversaciones con dos grandes cadenas de supermercados de Latinoamérica para comenzar su producción a gran escala.
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Iniciativas a futuro
Aparte de las de plástico, SoluBag se encuentra desarrollando bolsas de tela solubles reutilizables. Asimismo, también planean usar este material para la creación de uniformes para personal médico.
