Para muchas personas, es en los años universitarios cuando aprenden algunas de las lecciones más importantes de sus vidas.
Sin embargo, a menudo la distancia y un poco de experiencia en el mundo real son necesarios para darse cuenta de lo que es importante.
Business Insider ha contactado con seis líderes para preguntarles: ¿qué es lo que desearía haber sabido cuando estaba en la universidad?
Arianna Huffington, CEO de Thrive Global, deseó no haberse dejado quemar en la universidad.
«Desearía no haber creído esa idea general de que el agotamiento es el precio necesario que tenemos que pagar para tener éxito. Ahora sé que igualmente habría alcanzado el éxito que tengo, pero lo habría logrado con más alegría, más felicidad y con un menor costo para mi salud y mis relaciones».
La autora y oradora, Laura Vanderkam, dice que desearía haber sido más proactiva con respecto a generar redes y aprovechar los recursos de su escuela.
«Solo el hecho ser estudiante es una gran oportunidad para generar contactos. Las personas por lo general están dispuestas a responder las notas de los estudiantes y reunirse con ellos de una manera que no lo harán con los adultos «normales». Ojalá hubiera sido más proactiva al acercarme a las personas que quería conocer que visitaban mi universidad, que habían asistido a ella o que tenían alguna otra conexión».
«La universidad también es un gran momento para generar una cartera de trabajo a la que se puede dirigir a las personas en el futuro. Escribí muchos artículos para publicaciones en la universidad, aunque con frecuencia escribía historias rápidas para obtener un pago rápido. Ese hubiese sido un buen momento para escribir textos más largos e investigados con mayor profundidad, ya que no tenía la presión diaria del plazo de entrega de un trabajo de tiempo completo».
«Creo que todo aquel que planee llevar a cabo un trabajo creativo después de la universidad realmente debería pensar en los recursos que tiene disponibles ahora y que no lo estarán más adelante». Si desea hacer la coreografía de un baile, es mucho más fácil encontrar un espacio en su universidad —reclutar bailarines, organizar un espectáculo y filmarlo en video— de lo que será cuando esté en el mundo real».
Randy Garutti, el director ejecutivo de Shake Shack, desearía haberse apartado más de su currículum. También le llevó tiempo apreciar el valor de permanecer en un lugar.
«Tenía un horario apretado con las principales clases de negocios en Cornell, aunque mis clases favoritas siempre eran las optativas como ‘Grandes libros’, en las que leía a los clásicos como Moby Dick y Shakespeare. A veces solo es necesario detenerse, no preocuparse tanto por lo que «se supone que se debe» aprender, y explorar qué otras cosas le interesan. Se sorprendería».
«Además, mis primeros años fuera de la universidad fueron un fantástico torbellino: viví en Aspen, Maui, Seattle y luego de regreso en Nueva York. Nunca olvidaré que cuando me mudaba de Seattle a Nueva York, mi tutor me dijo: «Eres demasiado joven y estúpido para apreciar esto hoy, pero algún día te darás cuenta de que el verdadero aprendizaje sucede cuando ves pasar las estaciones sentado en la misma silla».
Dieciocho años después, aun en Nueva York trabajando con Danny Meyer [el fundador de Shake Shack] y al ver lo que hemos construido, sé que él tenía razón».
El exastronauta y orador motivacional, Leroy Chiao, desearía haber sabido que se necesita algo más que trabajar arduamente para lograr el éxito.
«Mis padres eran oriundos de China, de modo que si bien nací y crecí en los Estados Unidos, me inculcaron la idea de que lo importante en la vida era trabajar arduamente y que las recompensas provendrían de ese gran esfuerzo.
Solo más adelante, realmente comencé a creer que un factor importante en el éxito propio tiene que ver con las relaciones y la política. Durante mi juventud y mi vida universitaria, pensaba que el trabajo arduo y el compromiso eran las cosas que me sacarían adelante.
Me gustaría haber sabido entonces que no solo se trata de lo que se sabe, sino también del contexto político de una situación. Esto es así, independientemente de si se trata de unas pocas personas o a gran escala».
Según Amy Bohutinsky, directora de Operaciones de Zillow, se puede aprender algo de cada trabajo que se realiza, incluso si la profesión termina en algún otro lugar.
«Estudié periodismo en la universidad y soñaba con ser una periodista de radio y televisión, y cambiar al mundo a través de mis impactantes historias. Obtuve un trabajo en las noticias locales fuera de la escuela, y al cabo de unos años me di cuenta de que cubrir huracanes, incendios y accidentes de tránsito no era lo que yo había soñado. Lo sentí como un fracaso porque únicamente me había centrado en un resultado en particular. Solo unos años después, me di cuenta de lo mucho que había aprendido en ese trabajo, que aporta color a mi manera de trabajar hoy».
«En la universidad, desearía haber sabido que no es tan importante enfocarse en lo que se quiere ser, como enfocarse en lo que se quiere aprender a través de la experiencia. Las carreras más interesantes y enriquecedoras toman muchos giros, y se necesita curiosidad, apertura y fracasos ocasionales para crear las mejores oportunidades».
Para Dan Lewis, cofundador y director ejecutivo de Convoy, no hay problema si se toma un tiempo para darse cuenta de qué tipo de persona es usted.
«Uno no sabe quién es en realidad hasta los 20 y los 30 años. No intente descubrirlo demasiado pronto. Es mucho más importante ir en la dirección correcta que llegar lo más rápido posible».
Según Paul Yanover, el presidente de Fandango, es importante planear para el largo plazo durante la juventud.
«Siempre debemos recordar planear para el largo plazo. En la universidad, uno está centrado en cuestiones más concretas y recibe constantemente calificaciones: es un juego corto con recompensas a corto plazo. En un trabajo, podría tomar años recibir una calificación. No pierda de vista el resultado y mantenga el rumbo sin perder la perspectiva general. Reconozca cómo su trabajo encuadra en la estrategia más amplia de la empresa. Comprométase a tener un efecto real en el negocio y no busque solamente una calificación a corto plazo».
«En la universidad, uno está rodeado de muchos recursos disponibles en el campus, desde asesores y consejeros hasta centros de recursos y tutores. En el trabajo, no siempre es posible tener el mismo tipo de acceso a recursos increíbles. Tenga en cuenta que cada persona en la oficina puede ser un gran recurso que lo ayude a aprender y crecer. Aproveche, hable con todas las personas que lo rodean (ya sean sus pares o personas mayores que usted) y tome el control usted mismo. Tome la iniciativa y utilice los recursos disponibles para impulsar su propio éxito».
La directora de tecnología de Tinder, Maria Zhang, desearía haberse dado cuenta antes de que ella pertenecía a su campo dominado por hombres.
«Como especialista en informática, había muy pocas alumnas en mis clases y menos aún modelos femeninos a los que pudiera admirar en la industria de la tecnología, lo cual hizo que me cuestionara constantemente a mí misma y a mis elecciones profesionales.
Hubo momentos en los que incluso consideré abandonar, a pesar de los estupendos resultados obtenidos, porque sentí que no encajaba».
«Desearía haber sabido que mi falta de confianza, mi miedo y autoanálisis de hecho me limitaban. Me llevó varios años darme cuenta de que el motivo por el que elegí la ingeniería es porque realmente es mi pasión y saca partido de mis puntos fuertes: aprender rápidamente, resolver problemas complejos de manera eficiente y colaborar con otros».
«Si bien sigo aprendiendo algo nuevo cada día, siento que finalmente puedo decir con confianza que soy una gran líder de ingeniería».